Reflexión TIC

 

Vivimos un momento educativo apasionante y, al mismo tiempo, lleno de contradicciones respecto a las innovaciones. Las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) han dejado de ser un complemento para convertirse en un elemento cotidiano del aula. Ya no hablamos de futuro, hablamos de presente. Y eso nos obliga, como docentes, a reflexionar con calma, criterio y sentido pedagógico. Un ejemplo es el uso de la Inteligencia Artificial (IA), que debe servir como apoyo y no como sustituto del trabajo que realizamos. 

Incorporar tecnología al aula no es sinónimo de innovar (ya que muchas veces no tiene rendimiento positivo). Disponer de tablets, pizarras digitales o plataformas educativas no garantiza aprendizajes significativos si no existe una intención didáctica clara detrás y una capacitación o alfabetización digitalizada correcta. La clave no está en la herramienta, sino en cómo y para qué se utiliza. La tecnología debe estar al servicio del aprendizaje, nunca al revés.

Uso educativo de las TIC en el aula

Imagen: Aula inclusiva con uso educativo de tecnología digital.

Desde la práctica diaria, las TIC ofrecen oportunidades reales para atender a la diversidad, incrementar la motivación y desarrollar competencias clave como el pensamiento crítico, la creatividad o la competencia digital. Permiten que el alumnado aprenda a su ritmo, investigue, cree y colabore, convirtiéndose en protagonista activo de su propio proceso de aprendizaje.

No obstante, también es necesario hablar de los riesgos. El uso excesivo o poco reflexivo de la tecnología puede generar distracción, dependencia o desigualdades si no se garantiza el acceso equitativo. Por ello, el papel del profesorado resulta fundamental. Debe ser de acompañar, orientar y educar en un uso responsable, crítico y ético de las TIC.

La tecnología con sentido pedagógico

La formación docente es otro pilar esencial. No se trata de dominar aplicaciones de moda, sino de integrar la tecnología de forma coherente en la programación, alineándola con los objetivos de aprendizaje, la metodología y la evaluación. En este sentido, marcos como el DigCompEdu ayudan a orientar el desarrollo de la competencia digital docente desde una perspectiva pedagógica y realista.

Recursos y marcos de referencia

TIC en el aula

En conclusión, y bajo mi experiencia educativa y de digitalización, las TIC no son una solución mágica, ni una moda pasajera. Son, y deberían ser, una herramienta potente que, bien utilizada, puede transformar el aula en un espacio más inclusivo, participativo y conectado con la realidad. El verdadero reto no es tecnológico, sino pedagógico. Y ahí es donde el compromiso docente marca la diferencia.

Educar en la era digital implica reflexionar, cuestionar y decidir con sentido común. Porque, considero que la verdadera innovación educativa no está en la pantalla, sino en la mirada con la que enseñamos. La brecha digital existirá mientras alumnado use las TIC sin alfabetizarse con consciencia.

Fuente: Wilson Sánchez (Pinterest)

 

Referencias (APA 7ª edición)


Gaspar Parras Jiménez
Docente · Educación Física · Idioma extranjero Inglés · Agente de innovación Digital

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