Que la devoción a la Virgen de la Cabeza se extiende más allá de nuestras fronteras es algo fácil de reconocer por todos los rincones del mundo, pero, a veces, no nos paramos a pensar que la relación con Nuestra Señora de la Cabeza y el nombre de su advocación nace directamente desde las raíces de nuestras vidas cuando solo somos niños o niñas. Es aquí cuando aparece uno de los pilares más importantes de nuestra sociedad: la educación.

CENTROS EDUCATIVOS

Se cuentan por centenas los centros educativos que tienen el privilegio de contener el nombre de la Santísima Virgen de la Cabeza, repartidos por toda la geografía. Entra dentro de lo normal que las localidades cuyo patronazgo pertenece y fue otorgado a la Virgen de la Cabeza tengan un centro educativo a su nombre y honor, pero también sucede donde tan solo existe devoción sin tener ese reconocimiento oficial.

Municipios andaluces como Priego de Córdoba, Benamaurel, Beas de Granada, Churriana de la Vega, Valle del Zalabí-Esfiliana, Begíjar, Campillo de Arenas, Cazorla, Ronda, Canillas de Aceituno, Marmolejo, Motril, o Andújar —que cuenta con el Instituto de Enseñanza Secundaria y el Colegio de la Comunidad Trinitaria, donde se encuentra la Imagen de la Virgen de la Cabeza que procesiona en la ciudad andujareña— son ejemplos en nuestra comunidad andaluza. Fuera de ella, también podemos encontrar reconocidos centros escolares como los de Tudela, en Navarra, y Valdepeñas, en Ciudad Real. Además, diversas instalaciones deportivas llevan el nombre de la Virgen de la Cabeza, promoviendo la educación y formación integral de la juventud bajo su advocación.

ACTIVIDADES ESCOLARES EN TORNO A LA VIRGEN DE LA CABEZA

Por su parte, el Colegio Virgen de la Cabeza de Andújar, de la Fundación Educativa Santísima Trinidad, destaca por celebrar los pregones juveniles, promoviendo la participación de estudiantes de Educación Secundaria. El concurso de pintura para el cartel de la romería escolar, en el que participan todos los colegios de Andújar, y el concurso de sevillanas escolares organizado por el Ayuntamiento andujareño en la Plaza de España durante la semana de la romería son también muestras de la intensa relación entre educación y devoción.

En otras localidades cercanas, también se integran actividades devocionales en el currículo escolar, como redacciones y pinturas dedicadas a la Virgen de la Cabeza. En El Carpio, la cofradía organiza una romería escolar propia y cuenta con un dinámico Grupo Joven. En Málaga, cada año se elige a la “Savia Romera”, un título destinado a involucrar a los jóvenes en la vida cofrade como presente y futuro de la Hermandad.

La formación en la devoción no se detiene en la educación primaria o secundaria. Estudiantes de Bachillerato, Formación Profesional y Universidad participan activamente en las cofradías, como sucede en la Cofradía Matriz con su coro, grupo de abanderados o tamboristas, mostrando que la herencia devocional se mantiene viva y adaptada a las nuevas generaciones.

LABOR CATEQUÉTICA Y ENCUENTROS JUVENILES

En el ámbito educativo, también es fundamental la labor de los catequistas en las parroquias. Un ejemplo destacado es el Encuentro y Peregrinación de Jóvenes organizado anualmente en octubre por la Delegación de Juventud, que incluye un variado programa de actividades destinadas a fortalecer la Fe y devoción entre los más jóvenes.

Por su parte, la Cofradía Matriz organiza el Encuentro de Jóvenes Cofrades, donde se proyectan charlas y vídeos formativos. Otro evento clave es la Peregrinación de Jóvenes en marzo, que congrega a miles de personas para compartir un día lleno de fraternidad y devoción hacia la “Morenita”.

UNA DEVOCIÓN DE POR VIDA

Desde la infancia, con la Festividad de la Candelaria, hasta los últimos pasos de su formación académica, los jóvenes romeros y devotos son guiados por la Virgen de la Cabeza en su peregrinar educativo y espiritual. Este proceso no solo culmina con el crecimiento personal, sino también con su implicación activa en Cofradías, Peñas Romeras y Asociaciones. La devoción a la “Rosa de Oro”, sembrada desde la infancia, se convierte en un regalo y herencia invaluable que las generaciones futuras seguirán cultivando.

El mejor legado que los niños y jóvenes reciben es la enseñanza de vivir siempre con la Virgen de la Cabeza en sus corazones. Bajo el bendito amparo de la Santísima Virgen, los jóvenes romeros encuentran en ella la guía para alcanzar sus metas, fortaleciendo su fe y su compromiso con la comunidad. Así, la educación y la devoción se entrelazan en un camino que trasciende generaciones, perpetuando el amor eterno a Nuestra Madre, la Morena del Alma, Pastora celestial de los jóvenes romeros.